Rusia pronto tendrá las armas nucleares más avanzadas del mundo, aseguró este viernes el presidente Vladimir Putin. El nuevo vehículo hipersónico Avangard estará listo el año próximo y el misil balístico intercontinental Sarmat llegará en 2020, precisó en una conferencia en Sochi.
El Avangard y el Sarmat estaban entre una exhibición de avanzadas armas nucleares presentadas por Putin en marzo.
El líder ruso dijo que el Avangard tiene alcance intercontinental y es capaz de volar a 20 veces la velocidad del sonido. Añadió que es capaz de modificar su altitud y su rumbo a medio vuelo, por lo que es “totalmente inmune a cualquier mecanismo de defensa aérea o misilística”.
Aseguró que está hecho de materiales capaces de resistir temperaturas de 2 mil grados centígrados y que por eso puede soportar surcar los cielos a velocidades hipersónicas.
“Vuela hacia su objetivo como un meteorito, como un cometa”, aseguró en marzo.
La idea de Rusia es que el Sarmat reemplace al Voyevoda, un misil de diseño soviético capaz de llevar 10 ojivas nucleares. Las fuerzas estadounidenses lo apodan “Satanás”.
Putin dijo en marzo que Sarmat pesa 200 toneladas métricas y es capaz de volar a altitudes mayores que el Satanás, por lo que puede circundar el Polo Norte o el Polo Sur y llegar a cualquier objetivo en el planeta. Además, dijo que Sarmat es capaz de llevar más ojivas nucleares y más potentes, que el Satanás.
Putin aseguró que el proyectil es capaz de acelerar más rápido que sus predecesores, con lo cual es más difícil interceptarlo en su fase más vulnerable, justo después del lanzamiento. Aseveró que el Sarmat lleva una variedad de ojivas capaces de burlar cualquier defensa antimisiles.
Durante una reunión con comandantes militares al cierre de una serie de conferencias realizadas los últimos días, Putin expresó que el nuevo arsenal nuclear ruso es muy superior a los de cualquier otro país.
“Estos sistemas bélicos están años y quizás décadas por delante de cualquier análogo extranjero”, afirmó el mandatario ruso.
“Han hecho que muchos sistemas extranjeros desarrollados a un costo sumamente alto hayan quedado totalmente inútiles y obsoletos”, añadió.
