En Apetatitlan, la fauna se peleaba por el cuerpo que estaba envuelto en un suéter y una sábana

Sergio Espinoza

Este lunes alrededor de las 11 de la mañana, elementos policiacos atendieron el reporte al 911 del hallazgo sin vida de una recién nacida, que envuelta en un suéter y un paño blanco fue abandonada en un terreno baldío ubicado en la cabecera municipal de San  Pablo Apetatitlan en Tlaxcala.

Por ello, los representantes de la autoridad en compañía de paramédicos de la Cruz Roja se constituyeron en la calla Profesor Isaac Cervantes, donde confirmaron la información y constataron que el pequeño ser carecía de signos vitales.

Por lo que procedieron a acordonar el sitio en espera del arribo del personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), para que tomara conocimiento y llevará a cabo la diligencia ministerial del levantamiento de cadáver.

Acto de autoridad que concluyó casi a la una y media de la tarde, cuando previo recorrido del espacio ocioso se logró ubicar entre la maleza lo que podría ser la placenta que ocupaba el bebé antes de su alumbramiento y abandono.

Y es que según versiones de trabajadores de la construcción, que laboraban en la edificación contigua al lugar del hallazgo, se percataron que de manera insistente unos perros hurgaban entre la yerba crecida; los que fueron ahuyentados en varias ocasiones.

Situación que incluso los obligó a espantar a los canes y revisar un envoltorio integrado por una prenda de vestir y un trapo, pudiendo observar que se trataba de una bebé que tenía presente el cordón umbilical; descubrimiento que fue informado a las autoridades, quienes actuaron en consecuencia.