Por Aldo Romero

Calma, tranquilidad y momentos de reflexión junto con la familia es lo que muchos jugadores de las ligas más importantes de futbol piden ante la crisis internacional que se ha desarrollado por la pandemia del Covid-19 o Coronavirus. Así como la economía mundial se convulsiona y debilita, el mundo del deporte vive una de sus peores crisis.

En primera, y como ya lo había tocado en columnas anteriores, la celebración de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, si bien Japón no se encuentra en situaciones alarmantes como ahora lo están Italia, España y Estados Unidos, la Organización Mundial de la Salud ha decidió emitir las alertas para que sea pertinente cancelar todo evento multitudinario, así como la suspensión de viajes al extranjero “innecesarios”.

En ese sentido, competencias clasificatorias que se tenían que celebrar desde hace más de dos semanas continúan paradas y con un futuro incierto respecto a si se van celebrar en próximos días o hasta “nuevo” aviso. Todo esto ya ha provocado un grave retraso en el calendario olímpico, y lo que a su vez ha generado que el comité olímpico comience a definir de manera urgente que es lo qué procederá de cara a la máxima justa deportiva; así es, el fututo de las olimpiadas pende de un hilo.

Desastre económico será para los patrocinadores y el país organizador si se decide desarrollar la competición hasta finales de año o si bien nos va, hasta el 2021. Ante lo ya mencionado y como una señal de esperanza, la llama olímpica salió de la antigua Grecia para emprender su tradicional e histórico recorrido desde el pasado jueves.

En el viejo continente y hoy nuevo epicentro del Coronavirus, la UEFA ya tomó medidas serias ante la contingencia, grandes ligas de futbol ya han sido canceladas, mínimo por un periodo de 15 días en lo que el número de contagios comienza aminorar, pero que sin duda traerá efectos graves en el calendario futbolístico.

La liga holandesa (eredivise) está suspendida hasta el 31 de marzo, la liga italiana (Calcio Seria A), suspendida hasta el 3 de abril, dicha liga entra en las estadísticas de los contagiados, pues Daniele Rugani de la Juventus y Manolo Gabbiadini de la Sampdoria dieron positivo al Covi-19. La Liga Española (La Liga), estará suspendida al menos por dos semanas, cabe destacar que el jugador de baloncesto Trey Thmpkins del Real Madrid dio positivo al nuevo virus.

La liga inglesa (Premier League), ya analiza celebrar partidos a puerta cerrada, el técnico del Arsenal, Mikel Arteta, dio positivo de Covid-19.

La Liga de Suiza (Super Legue) suspendida hasta el 23 de marzo, la liga de Bélgica se desarrollará a puerta cerrada y la Liga de Portugal está suspendida hasta nuevo aviso.

Asimismo, los juegos que restan de vuelta de la fase de octavos de final de la Champions Legue y Europa League serán aplazados y probablemente se jugaran a puerta cerrada. Recientemente se ha dado a conocer que a partir de octavos de final y hasta las semifinales, los juegos se podrían jugar a un solo partido, con el objetivo de acelerar el calendario.

Como lo había mencionado, las medias implementadas por la UEFA deterioran el calendario futbolístico, ya que en 3 meses se “juega” la Eurocopa 2020, y digo se juega entre comillas porque hasta el momento todo parece indicar que se aplazaría hasta el 2021.

En el continente americano, la MLS, NBA Y MLB, los tres torneos gringos, ya están suspendidos hasta que se sepan las nuevas indicaciones de su sistema de salud.

En México, la Liga MX varonil y femenil ya se disputan a puerta cerrada y según el hombre de cuello blanco Enrique Bonilla, ante la fase 2 a la que ha entrado el país y en caso de aumentarse el número de contagios, el futbol mexicano también se tomaría un largo descanso.

La Copa Libertadores está en paro hasta el 21 de marzo y se han aplazado los dos primeros juegos de la eliminatoria mundialista en Sudamérica. Al igual que la Eurocopa, la Copa América 2020 también podría cambiar de fecha y disputarse hasta el 2021.

Así de complicado está el panorama del deporte mundial y no resta más que esperar las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud y esperar a que para principios de abril ya se den las primeras buenas noticias y que los contagios ya no se multipliquen.