En Tlaxcala deberán desaparecer por completo acciones de tortura.

Aldo Romero.

Desde el caso registrado de tortura al que fueron sometidos los ex policías estatales acreditables por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en el año 2015, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), afirmó que no ha recibido quejas de un caso de ese tipo por parte de alguna policía municipal o estatal, pero enfatizó que, de presentarse alguna queja por maltrato, el personal de la Comisión intercederá en defensa de los agraviados.

El ombudsman de Tlaxcala, Víctor Manuel Cid del Prado Pineda, destacó que dio a conocer a las autoridades de los 60 municipios, la policía estatal y la federal de que, en la entidad, se ha tenido una baja en cuanto a los casos de tortura, por lo que pudo afirmar, que esta violación a los derechos humanos ha dejado de ser una práctica dentro de las instancias de seguridad de los tres órdenes de gobierno.

Sin embargó, hizo énfasis de que personas que han sido detenidas, han presentado su denuncia al argumentar que fueron maltratadas por parte de los cuerpos policiacos durante su detención: “el que todos hablemos el mismo idioma es importante, todo acto denigrante y más aún, uno referente a la tortura debe erradicarse, de ahí la importancia que los servidores públicos conozcan y reconozca el asunto del pleno respeto a los derechos humanos.”.

Por último, Cid del Prado Pineda enfatizó que, desde que asumió el cargo en la CEDH, no han tenido registros de casos por tortura, pero sí de maltratos, sobre todo de policías municipales, pero estos son atendidos de manera inmediata por personal de la Comisión: “todo aquel que es servidor público o funcionario público, debe reconocer que el respeto de los derechos humanos es fundamental”, puntualizó.

 

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