Alondra Cazares

Derivado de la confusión que provocó entre los apizaquenses la puesta en libertad de dos de los detenidos que supuestamente estaban involucrados en el asalto a una sucursal bancaria que se encuentra en el centro de la ciudad, el alcalde Julio Cesar Hernández Mejía, dejó en claro que la policía no tuvo nada que ver con dicha acción y que fue parte del proceso judicial que se siguió.

De acuerdo con información certera sobre el caso de los entonces inculpados, fueron las pruebas que se recabaron con las aportaciones de los videos grabados por las cámaras de seguridad de la misma sucursal bancaria, así como de los testimonios de los testigos, lo que permitió a la Procuraduría del Estado comprobar la inocencia de las dos personas detenidas.

Hernández Mejía, dio a conocer a la ciudadanía que los elementos del Grupo de Operaciones Especiales (Goes), al momento de frustrar el robo se llevaron detenidos a los dos jóvenes que fueron señalados como cómplices, no por equivocación, sino porque al momento fueron etiquetados como artífices del intento de robo: “el grupo de operaciones, como toda la policía actuó porque hubo señalamiento directo”, declaró.

Asimismo, aclaró que la policía lo único que realiza es garantizar la seguridad de la ciudadanía, por lo que serán facultades de los entes encargados de la procuración de justicia los que determinaran si existen elementos para vincular a un acusado o no.

“El trabajo de la policía estuvo perfectamente bien hecho…se hizo todo el tráfico policial por el cual están capacitados nuestros elementos”, expresó.